Sentido Común
Luis Gabriel Velázquez
La salida de la cárcel de Javier Milián es una burla para cualquier ciudadano.
Por eso ya nadie les cree, por eso han caído tan fácil en el odio ciudadano.
El hombre que a todas luces tiene actividades ilícitas por el tipo de negocio que maneja salió porque tiene dinero y porque tiene recomendaciones, y porque desde lo más alto recibió ayuda para no pisar la cárcel más de 72 horas.
La blandengue Casa de Justicia de San Andrés Cholula lo puso en libertad porque su detención fue ilegal, sospechosamente incorrecta.
“Qué miedo caer en manos de un juzgado y no tener lana para defenderse”, me decía por mensaje un ciudadano vía WhatsApp.
No saben ni el asco y el repudio social que han generado con hechos como estos.
Todo cae en manos de la Fiscalía General del Estado, quien se va a comer este putrefacto guisado de anomalías planeadas perfectamente para darle salida a través de sus representantes legales.
Por cierto, me cuentan que en esa Casa de Justicia hay jueces que visitan constantemente el Mamita’s y el 40 Grados. ¡Ya se ganaron su privadote!.
Pero ya me callo porque no sé ustedes, pero a mí sí me da miedo meterme con los dueños de estos antros, tan poderosos y tan protegidos.
Mejor mañana nos leemos y nos escuchamos.