La Casa Blanca fue escenario este martes de un encuentro de alto nivel entre el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman (MBS), y el presidente estadounidense Donald Trump, en una reunión que buscó afianzar la relación bilateral en materia de defensa, inversiones y cooperación tecnológica.
El encuentro incluyó una ceremonia oficial, reuniones privadas y una cena de gala, marcando la primera visita de MBS a Washington en siete años. Trump, quien ha mantenido un vínculo cercano con la monarquía saudí desde su primera administración, colocó especial énfasis en fortalecer la cooperación militar, destacando su intención de avanzar en la venta de aviones F-35 al reino árabe, una de las peticiones más relevantes del liderazgo saudí.
En el ámbito económico, Arabia Saudita planteó ampliar de forma significativa sus inversiones en Estados Unidos, con un enfoque en infraestructura, inteligencia artificial y proyectos energéticos, como parte de la estrategia de modernización planteada por el príncipe heredero. Analistas señalan que el objetivo saudí podría alcanzar cifras históricas.
La reunión también abordó asuntos de diplomacia regional. Entre ellos, la posibilidad de que Arabia Saudita se sume a una ampliación de los Acuerdos de Abraham, lo que representaría un giro geopolítico importante en Medio Oriente al normalizar relaciones con Israel, aunque ese punto sigue siendo altamente sensible.
La visita no estuvo exenta de críticas. Organizaciones de derechos humanos y la viuda del periodista Jamal Khashoggi—asesinado en 2018 dentro del consulado saudí en Estambul— reiteraron sus llamados a que se exija responsabilidad por el crimen, recordando el señalamiento de agencias de inteligencia estadounidenses que vinculan a figuras del gobierno saudí.
A pesar de la controversia, el encuentro dejó claro que la relación entre ambos gobiernos atraviesa un momento de fortalecimiento. Tanto Trump como MBS buscan consolidar una alianza estratégica que combine poder militar, expansión económica y proyección internacional.
