El gobierno de Islandia anunció este martes las medidas a considerar para la reapertura de fronteras, programada para el próximo 15 de junio. Desde esa fecha, los turistas que lleguen al país deberán aplicarse una prueba de coronavirus (COVID-19) en el Keflavík International Airport.
“Las consecuencias económicas de mantener el estado de las restricciones de viaje sin cambios serían enormes. Los viajes limitados en el mundo crean condiciones para dar pasos cautelosos hacia la apertura”, destacó la oficina de la primera ministra Katrín Jakobsdóttir en un comunicado.
Para garantizar una sana apertura de fronteras, el Ministerio de Salud anunció que los pasajeros que lleguen a Islandia tendrán la opción de realizarse el diagnóstico de COVID-19 en el aeropuerto; o bien, demostrar haberse realizado la prueba en el extranjero. Quienes se nieguen a la revisión médica, deberán pasar dos semanas en cuarentena.
Islandia, un país con 364 mil 134 habitantes, es de los primeros países en anunciar su reapertura a gran escala, después de haber confirmado mil 806 casos de COVID-19, de los cuales mil 794 fueron dados de alta y 10 han fallecido.